Puerto Madryn, marzo de 1914.

¡Mis queridos todos!

            Yo estoy muy triste porque se me va Marciana. Es dificil conseguir una muchacha trabajadora y de confianza. Ella ya conocía los quehaceres de la casa y los chicos la quieren mucho.

            Ahora trataré de conseguir en Buenos Aires una que hable alemán.¡Elsita es fatal y solamente habla el castellano y conoce bien su gramática ! Mejor que yo. Quisiéramos que aprenda el alemán porque el día que vayamos a Alemania¡ ustedes no entenderían lo que dice !

            Ella es un tesoro y todos la quieren y muchos dicen que nunca vieron una criatura tan preciosa. Pero lo que pasa es que ella es rubia y aquí a la gente le gustan los rubios.

            Como dos noches seguidas hemos recibido correspondencia de Alemania, Elsita hoy a la noche me dijo: ¿"Mamita traerá Papá otra vez una carta de Alemania cuándo viene?".

            Siempre quiere que les cuente de ustedes y cuando le conté que la Fridita recibió el huevo de avestruz, ella preguntó por qué no le mando otro más, ya que la pobre Fridita tuvo tantas "nanas".

            A nuestro Rodolfito le va bien, siempre está contento y se porta bien. Hoy a la tarde como fui al dentista se lo dejé a mi prima Else, pero ahí se puso triste. A Elsita le gusta quedarse porque el esposo de Elsita la mima.

            Mi prima Else y su esposo ahora se van a Ñorquinco, ya que la firma Braun & Blanchard lo nombró a él Gerente de esa sucursal. Allí van a estar bien y tranquilos y apartados de los celos de los demás.

            Mi hermana Bertha me escribió que las encomiendas que llegaban del extranjero a Alemania eran robadas. Así fue el empleado que las cobraba desapareció con $ 20.000.- pesos. Por eso no mandamos más paquetes y preferimos mandarle dinero a Papá.

            El otro paquete que le enviamos todavía está en el Puerto Militar y les voy a escribir pidiéndoles que me lo manden de vuelta.

            Pienso despachar las "muestras sin valor" certificadas, y a ti, querido hermano, te mandaré cigarrillos.

            Bueno queridos, para el cumpleaños de mi hermana Emma les vuelvo a escribir. Hasta entonces mil saludos de todos nosotros, vuestra

Frida.