Buenos Aires, 24 de junio de 1920.

¡Mis queridos!

            Por fin después de un mes recibí noticias de ustedes por intermedio de una carta de Adele. Yo ya estaba muy preocupada porque la última carta que recibimos fue del querido Hans del 13 de abril. Se imaginan que alegría recibir hoy buenas noticias.

            Pienso que mientras tanto estuvo la Sta. Siegfried con ustedes. Ojala les haya contado mucho de nosotros. En general la tildan como una solterona algo desagradable de carácter, pero tiene un buen corazón.

            Con el mismo barco en el que viajó la Sta. Siegfried, viajó el Sr. Baas, amigo de Rudolf y Ludwig. A bordo le dimos 4 frascos de fosfatina, dos para el pequeño Hans y dos para el nene del hermano de Rudolf,  Otto.

            A la Sta. Siegfried le hubiese gustado que nuestro paquete hubiese sido menor, pero así se aprovechó la ocasión.

            Mañana con el barco "Limburgia", viajan unos cuantos conocidos nuestros, pero nadie quiere llevar nada. Entre otros viaja el Sr. Dietze, un viejo conocido nuestro. La otra mañana nos fotografió en el jardín y se las va a entregar a ustedes personalmente. Es simpático y muy adinerado y soltero. El no escucha bien, pero tiene fama de andar atrás de las mujeres.

            ¿Les escribí que el Sr. Steinhoff también viajó a Alemania? Va a visitar de paso a mi hermano Ludwig. Todos los solteros van a Alemania para buscarse una esposa. ¿Cuándo iremos nosotros?

            Lo principal es que quedemos con salud, entonces el día de la bienvenida ya llegará.

            Hace poco vino un cajón de medias de Alemania así con el mayor valor del marco la exportación vuelve a funcionar.

            Ahora no puedo seguir escribiendo porque al Sr. Dietze le tengo que llevar esta carta. De Ludwig también esperamos una carta.

            Con mil saludos a todos ustedes de

vuestra Frida.