Puerto Madryn, 4 de marzo de 1913.

¡Mi querido Hermann y querida Adele!

            No quiero que Else despache su carta sin agregarles unas líneas. Lamentablemente las mantas de guanaco salen con el barco de hoy. Por un error no salieron con el barco anterior. Espero que lleguen para el cumpleaños del querido Hermann. Van nuestros mejores deseos de felicidad para tu nuevo año. Nos hubiese gustado festejar el cumpleaños con ustedes pero no es posible.

            Antes de ayer recibimos carta de Mamá, Bertha y Mimí de Curau. Nos alegramos por todas las noticias y envidio a Bertha por su estadía en Curau. Tus hijos seguramente van a pasar un invierno muy sano. El pequeño Henry ya tiene un año y según escribe Mamá y Bertha es un chico amoroso y sano. Siempre me alegro de saber de mi ahijada. Se le parece a Elsita.

            Es una pícara y habla entreverado el castellano con el alemán. Sólo que no puede decir frases enteras. Por su edad me parece que es la criatura más desarrollada de Madryn. Es casi demasiado gorda. No es de extrañar porque siempre tiene apetito. Cuando llegaron nuestras cartas decía ¡Omama, Opapa, Tante Dele, Ema, Bertha, Marga, Mimi y Lulu !

            Muchos besos de vuestra

Frida.